lunes, 29 de julio de 2013


“Nuevos Comisionados: Más allá de la Valentía y Vocación Pública”


El día de hoy el Comité de Evaluación anunció quienes son los candidatos a Comisionados que tienen derecho a realizar el examen de conocimientos “técnicos” este sábado 3 de Agosto para dirigir los nuevos organismos Comisión Federal de Competencia Económica (CFCE) y el Instituto Federal de Telecomunicaciones, es importante discutir algunos elementos cualitativos-que no necesariamente se capturaran con la evaluación- que deben tener los nuevos Comisionados más allá de ser “valientes” y de “alta vocación de servicio público”, que efectivamente necesarios, pero no suficientes para encarar los desafíos emanados de la Reforma de Telecomunicaciones y Competencia.

Independencia e imparcialidad son elementos torales para garantizar no sólo la operatividad de la nueva Reforma, sino el diseño y enfoque de regulación del interés público. Derivado de la Reforma, la sociedad depositará a los nuevos comisionados y su staff profesional la expectativa de que serán independientes entre ellos, del poder ejecutivo (Presidente y Gobernadores), del poder legislativo, de los partidos políticos, de diversas facciones e intereses de grupo, grupos de apoyo (think tanks y ONGs), y desde luego de las empresas dominantes.

Las empresas “reguladas”, notablemente incumbentes desde hace tiempo, están mejor posicionada que las no incumbentes o potencialmente entrantes. No es inusual que los lobistas de las industrias provean documentos de política (“hot documents”, draft policy) durante la etapa de formulación e implementación de la política de competencia y regulación económica. Dicha información, dirigida a los Comisionados, es persuasiva en favor de las empresas dominantes. La información raramente es neutral; expertos contratados tienden a ser tendenciosos, en ocasiones, los Centros, think tanks y fundaciones promueven ideologías. En este contexto, los Comisionados tendrán que ser meticulosos respecto a la calidad y valoración de la información. Para ello, es perentorio que la CFCE y el IFETEL desarrollen aún más sus áreas técnicas cuantitativas y generar sus propias metodologías de intervención y monitoreo constante con el fin de no depender de estudios externos en situaciones cruciales, lo que le daría a ambos reguladores mayor legitimidad y credibilidad en sus decisiones. Es inconcebible, por ejemplo, que no se haya desarrollado en más 15 años una regulación asimétrica para telecomunicaciones, o una metodología consistente y permanente de precios de interconexión, o que la CFC recurra a estudios externos de impacto de bienestar en temas cruciales.

La independencia de intereses políticos es una característica esencial que deberá tener los nuevos comisionados de la CFC y del IFETEL. Es claro que debido al contexto político y a la importancia de su cargo constitucional, los comisionados no deben ser apolíticos. Sin embargo, su accionar tiene que ser imparcial y no partidista, dedicado al servicio público, enfocado al interés público, alta capacidad intelectual, todo ello normado con los principios de humildad, integridad y ética.

Comportamiento ético es una condición esencial para la implementación independiente de la regulación. Dado la importancia de ser Comisionado, esto es una verdad de “perogrullo”. No obstante, violaciones a la ética deberían de ser más públicas e investigadas. Debido a la responsabilidad de su trabajo y los efectos en millones de consumidores a causa de sus decisiones, las expectativas de los nuevos Comisionados debieran ser demandantes: mantener altos estándares de honestidad, integridad, imparcialidad y su conducta esencial para garantizar el desempeño adecuado del gobierno y mantener la confianza de los ciudadanos en su gobierno.

En este contexto, cobra la relevancia el tema de transparencia, que es un valor en cada área administrativa del Gobierno, del poder legislativo y en las esferas judiciales. Las reglas de transparencia aplican a las instituciones, pero también están dirigidas a controlar el comportamiento individual. Frecuentemente la normatividad limita las vías de comunicación de los Comisionados, pero éstos deberán realizar esfuerzos adicionales para transparentar no solamente su accionar, sino también sus criterios y razonamientos que norman sus decisiones.

Si bien es cierto, que se debe capitalizar el capital humano acumulado en ambos organismos a nivel técnico, si creo que ambos organismos necesitan Plenos renovados, Comisionados con una visión más integral, creativa y crítica, con mayor especialización, es sano y necesario rejuvenecer a las instituciones.